Acusan en Los Angeles a policías de brutalidad policiaca contra joven

Los Ángeles.- Tres agentes del Departamento de Policía de Pomona (PPD) enfrentarán un juicio por golpear a un adolescente desarmado durante un arresto y por encubrir el abuso, reportaron hoy autoridades federales.

Representantes de la Procuraduría Federal en Los Ángeles acusaron a los tres agentes, entre estos un veterano de 20 años en la corporación, de atacar a un joven de 20 años y después de mentir para justificar las acciones durante un incidente que fue captado por el celular de un testigo.

Los agentes acusados formalmente el jueves ante un tribunal de Los Ángeles, son el capitán Chad Jensen, el oficial Prince Hutchinson y el sargento Michael Neaderbaomer, quienes se han declarado inocentes de las acusaciones.

Tras ser detenidos han sido dejados en libertad con una fianza de 50 mil dólares, pero deberán regresar a su juicio para el 19 de diciembre próximo.

Las acusaciones se basan en un incidente registrado en septiembre de 2015, cuando Christian Aguilar y su familia asistieron a la Feria del Condado de Los Ángeles en el Fairplex de Pomona. Como menor de edad, Aguilar no figura en los documentos judiciales, pero ha sido abierta su participación sobre el incidente.

Después de que un primo, frustrado por el cierre de una cervecería en la feria, intercambió algunas palabras con los agentes de policía, el padre de Aguilar intervino para calmar la situación, explicó David Gammill, abogado de la familia. La policía arrestó a ambos hombres bajo sospecha de intoxicación pública.

Mientras los hombres eran escoltados por varios oficiales, Aguilar los siguió a unos metros de distancia y comenzó a grabar con su teléfono, según Gammill. Cuando un oficial ordenó al adolescente que dejara de seguir al grupo, Aguilar rechazó la orden y siguió caminando, dijo el abogado.

Momentos después, Jensen tomó a Aguilar y lo empujó contra la pared. Un video de un transeúnte, publicado en las redes sociales, muestra a un oficial identificado como Jensen azotando a Aguilar y golpeándolo dos veces en la cara con el antebrazo, mientras el joven tenía ambos brazos a su lado. Los golpes hicieron que Aguilar retrocediera.

El oficial, identificado como Hutchinson, agarró al adolescente cuando otro agente le propinó un duro golpe con su bastón a sus rodillas. Hutchinson arrojó a Aguilar al suelo, muestra el video. Hutchinson y Jensen trabajaron como compañeros de patrulla, dijeron las autoridades federales.

Aguilar finalmente fue arrestado, junto con el transeúnte que filmó el video, dijo Gammill. El adolescente fue acusado de obstruir a un oficial de paz y su padre de intoxicación pública.

De acuerdo con la fiscalía, Jensen, de 50 años, y Hutchinson, de 31, mintieron en el informe sobre el incidente y cuando testificaron en el juicio del joven. Jensen también enfrenta cargos por violar los derechos civiles de Aguilar al usar fuerza excesiva.

En su informe del incidente, Jensen afirmó falsamente que golpeó a Aguilar después de que el adolescente intentó golpearlo en la cara y seguirlos cuando llevaban detenido a su padre.

Hutchinson dio una explicación similar en su informe, señalando falsamente que el chico los seguía a pocos metros y luego gritó a los espectadores en un intento de «incitar al malestar» mientras era llevado lejos, dijeron las autoridades federales.

Neaderbaomer fue asignado a la Unidad de Asuntos Internos del Departamento de Policía, según muestran los registros judiciales.

Cuando la madre de Aguilar intentó presentar una queja por la golpiza, Neaderbaomer trató de disuadirla diciéndole que tenía un video que mostraba a su hijo tratando de golpear a Jensen y que el niño tendría que reunirse solo con los oficiales de policía si quería interponer una queja, según los fiscales.

Neaderbaomer, de 49 años, también está acusado de mentirle a los agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) sobre la conversación que mantuvo con la madre de Aguilar.

En caso de ser sentenciados, los oficiales enfrentarían sentencias máximas de 30 a 50 años en prisión.

En una entrevista, Gammill dijo que el transeúnte que grabó el encuentro violento fue liberado sin cargos. Sin embargo, antes de devolver su teléfono, la policía descargó el video.

Antes del juicio de Aguilar, los fiscales locales de la Oficina del Fiscal del Distrito de Los Ángeles dieron a Gammill una copia del video del espectador que la policía de Pomona había presentado como parte de su investigación.

Los primeros segundos del incidente, cuando Jensen tiró de Aguilar de la pared y lo hizo girar, desaparecieron. Sin esas imágenes, dijo Gammill, no existe  evidencia para refutar la afirmación de los oficiales de que la fuerza estaba justificada.

En el juicio de Aguilar, Gammill dijo que mostró el video completo y lo comparó con la versión policial, que según argumentó el abogado había sido editada.

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